Un legado de vida que rebosa prestigio, integridad y fidelidad a Dios, nos están dejando los pastores Cristel Kunsch y Carlos Sokoluk, padres de multitudes.
Cristel y Carlos construyeron su legado durante 46 años -y siguen en plena construcción-, escuchando y haciendo la voluntad del Padre. Es decir, expandiendo el Reino hasta más no poder, como instrumentos escogidos de Dios para la salvación eterna y posterior transformación en una nueva vida en Cristo Jesús, de miles y miles de personas. Y, al mismo tiempo, haciendo discípulos a los que, en una inconmensurable generosidad pastoral, impulsan a abrir nuevas obras, en ese plan inigualable denominado “plantación de iglesias”.
Un día como hoy, 13 de febrero, pero de 1979, los pastores Cristel y Carlos Sokoluk, llegaban a Posadas para plantar en esta ciudad la primera iglesia de la Unión de Asamblea de Dios (UAD). Esa iglesia es Feliz Encuentro, que se encuentra sobre calle Ayacucho 75 de Posadas (Misiones), y ambos pastores siguen al frente de la misma, juntamente con el matrimonio, también también pastoral, conformado por Florencia y Zebadías Escobar.
¡Qué honor es ser hijos espirituales suyos, pero, al mismo, tiempo, qué gran responsabilidad!
EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE ELLOS
Salvación, transformación de vidas, formación de nuevos discípulos y plantación de iglesias, son el eje de sus vidas, porque, justamente, ése es el EJE MACRO de la VOLUNTAD DE DIOS. Voluntad que ellos decidieron un día, tras rendirse totalmente al Señor, cumplir en plenitud.
Por todo eso, hoy glorificamos y damos gracias a Dios por habernos dado pastores que al escuchar y hacer su voluntad, nos guían “con sabiduría y entendimiento”.
Damos gracias a Dios porque podemos cantar y alabar al Padre diciendo:
¡Qué hermosos son, sobre Posadas y sobre toda Misiones, los pies de los pastores Carlos y Cristel, que trajeron y siguen trayendo buenas nuevas; que proclaman la paz, que anuncian buenas noticias, que proclaman la salvación, y que dicen que el Dios de Israel reina!
PASTORES CARLOS Y CRISTEL, LOS BENDECIMOS Y QUE EL ESPÍRITU DE DIOS SIGA ESTANDO SIEMPRE SOBRE USTEDES, DÁNDOLES LA FUERZA QUE NECESITAN PARA SEGUIR SIENDO CANALES DE SALVACIÓN Y TRANSFORMACIÓN DE VIDAS.
