Cristo eligió a 12 y sigue eligiendo, a quienes transformará para que continúen su misión

“Además de la gran meta de la cruz, Cristo armó un equipo para que continuara con la evangelización, que liderara las buenas noticias que él vino a dar”, resaltó en su prédica la pastora Florencia. Además, explicó cómo el Señor sigue eligiendo hoy a quienes seguirán haciendo esa tarea. “Pero lo primero que tenemos que saber para nuestra vida, para nuestra identidad en Jesús, es que no lo elegimos nosotros a él, sino que fuimos elegidos por él”.

El llamado divino en medio de la cotidianidad

En su prédica, la pastora Florencia Escobar abordó el pasaje de Marcos 3:13-19 y destacó el privilegio de ser llamado por Jesús. Con ejemplos cotidianos y un lenguaje cercano a las experiencias de cada uno, invitó a todos a abrazar su identidad divina y dejarse transformar por la gracia.

La pastora inició su mensaje recordando aquellas elecciones de la infancia, cuando en un juego se decidía quién era el elegido. “¿Les pasó sentir esa emoción al ser el primero en ser elegido?”, preguntó, conectando de manera directa con la experiencia de todos.

Para ella, la selección de los discípulos en Marcos no es muy distinta: Jesús llamó a aquellos que, sin mérito propio, fueron elegidos para acompañarlo.

Una elección que trasciende lo humano

Basándose en el relato bíblico mencionado, Florencia Gutiérrez explicó que Jesús subió a un monte y llamó a quienes Él quiso, designando a doce discípulos para predicar, sanar y expulsar demonios.

En ese contexto, Florencia comparó esa selección de Cristo con las que sigue haciendo hoy en todo el mundo para que se siga con la tarea evangelizadora.

“Y lo bueno de estar viendo en este tiempo lo de Marco, es poder ver las sencillez de las palabras. Y aunque esta verdad pudiera ser sencilla es parte estructural de nuestra identidad en Dios, que es saber que Él nos elige”, explicó.

“Pero –agregó- lo primero que yo tengo que saber  para mi vida, para mi identidad en el Señor, es que no elegiste vos a Jesús, sino que fuiste elegido por él. ¿Qué te produce saber eso?”.

Florencia enfatizó que “no elegiste vos a Jesús, sino que Él te eligió a vos”, recordándonos que la verdadera elección es un acto de amor y conocimiento divino que trasciende nuestras limitaciones y dudas.

Entre la alegría y la incertidumbre

La pastora abordó el sentimiento agridulce que muchos experimentan al ser llamados. Si bien es motivo de gozo saber que uno ha sido escogido por Dios, también puede nublarse por la inseguridad y el temor de no estar a la altura. Con ejemplos tan simples como la contratación en un empleo —donde se valora a la persona por lo que es, más allá de sus defectos—, invitó a sus oyentes a confiar en que la elección divina reconoce y abraza incluso nuestras debilidades.

“Creer es desarrollar la convicción de que frente a cada obstáculo que se tenga en esa elección divina, hay que reconocerlo para sumir las debilidades y ahí va a estar su gracia cubriendo mi vida y su poder va a perfeccionarme para que yo pude superar esa fragilidad”, enseñó la pastora.

Conocer y estar con Jesús, y confesar nuestros pecados

La pastora Florencia Escobar resaltó la importancia de estar con Jesús para poder ser transformados. Para ella, leer la Biblia es mucho más que absorber palabras: es encontrarse con una Palabra viva que transforma el interior. “Estar con Jesús implica orar, leer su palabra y participar activamente en la comunidad de fe”, afirmó, invitando a cada uno a fortalecer su relación personal con el Señor.

“Ahora, ¿Cómo actúa la gracia en mi vida?”, se preguntó y le preguntó a los que participaron en el culto del fin de semana pasado, en el cual ella predicó.

“Cuando nosotros pecamos, tenemos la oportunidad de confesar ese pecado: confieso mi culpa, confieso mi error, pido perdón. ¿Y Dios que hace? Me perdona y me limpia; es sencillo”, respondió.

“¿Qué tuviste que hacer vos? –volvió a interrogar y respondió- Confesar. hablar. Ahora, esta es una realidad espiritual que vos tenés que creer que Dios te perdona y limpia tu vida cubriéndote con su brazo y te dice, bueno, vamos, vamos, vamos hacia adelante, metele”.

Una invitación a vivir la obra de Dios

Finalmente, la pastora hizo un llamado a la acción. Ser elegido por Dios no significa simplemente recibir un título, sino comprometerse con la obra de transformar nuestras propias vidas.

“Decide hoy dejar que Dios transforme tu vida. Tú fuiste elegido para estar con Él y para llevar su luz a los demás”, destacó, animando a la gente a rendirse al proceso de transformación que sólo la gracia divina puede obrar.

“Es muy bueno que vos escuches prédicas, pero no es lo mismo que leer la Biblia. ¿Por qué? Porque un libro de un autor X, un libro de un médico, o de quien sea, solamente contiene información, vamos a poder tener referencias del tema que nos interese”, señaló la pastora.

Pero resaltó que “la Biblia es viva, es decir que cuando la leemos, estamos con Jesús porque está viva la palabra de Dios. Es algo dinámico, es entender que Él me está hablando, que me está transformando, porque dice que  la palabra de Dios es viva y eficaz, más cortante que espada de doble filo y que me transforma totalmente”.

Con su mensaje cargado de fervor y cercanía, Florencia Escobar recordó a todos que la verdadera identidad del creyente se funda en ser parte del plan divino. Así, su exposición se transformó en una invitación poderosa para vivir con convicción, sabiendo que, “en cada paso, Dios nos elige, nos llama y nos transforma”, concluyó.