DIOS ES ESPÍRITU. “La mente humana es incapaz de captar lo que es Dios. Es incapaz de captar lo que Él me ofrece”, sostuvo la pastora Florencia Escobar. “¿Por qué sucede esto?”, se preguntó, y contestó que es así “porque Dios es espíritu; Él no es razón, no es alguien humano como nosotros. Dios es espíritu. Y yo necesito acercarme, para adorarlo, porque eso es lo primero que dijimos en el primer mandamiento, que sólo a Dios vamos a adorar. Y para adorarlo a Él, lo tengo que hacer en espíritu, y lo tengo que hacer en verdad. Y si es en espíritu que yo me acerco, tengo que conocer qué es lo que me acerca a Él”.
“¿Qué me puede conectar con ese Dios espíritu?”, se preguntó la pastora Florencia Escobar en uno de los cultos del Templo Feliz Encuentro, en los que predicó el fin de semana pasado. “Y la Biblia nos revela que es la fe”.
“La fe –añadió- es el medio para conectarnos con ese Dios que es espíritu, con ese Dios que no tiene ninguna comparación. Es la fe. Yo solamente puedo acercarme a Dios través de la fe. Y esa fe, ¿quién me la revela? Me la revela la palabra, las escrituras, el Espíritu Santo”.
Obedecer los mandamientos nos beneficia
La pastora explicó que “los mandamientos muestran el carácter de Dios, muestran lo que Él es. Pero esos mandamientos encima no van a beneficiarlo más o menos a Él, a Dios, sino que nos van a beneficiar a nosotros. Seguirlos, practicarlos, obedecerlos, van a renovarte a vos, van a enfocarte a vos y te van a hacer permanecer en el Señor”.
Resaltó que “obedecer la palabra del Señor es para siempre. Es lo que te hace permanecer, es lo que te va a hacer resistir. Y entonces, de esta manera, nosotros vamos a ir comprendiendo lo que Dios quería decirnos y lo que quiere beneficiarte a vos con estos mandamientos”.
Florencia dijo que “nosotros empezamos viendo lo que son los 10 mandamientos, y el primero que vimos es el que dice ‘no tendrás dioses delante de mí’”.
Explicó que la decisión de encarar este plan de prédicas “es porque quizás alguien pueda pensar -y hay algunos que piensan-, que los mandamientos tienen que ver con algo que ya pasó”.
“Pero –agregó- se van a ir dando cuenta a medida que vayamos compartiendo estas palabras, esta serie, que realmente los mandamientos muestran el carácter de Dios, muestran lo que Él es”.
El artista de una imagen se vuelve creador del Creador
El primero, de los 10 mandamientos, dice “No tendrás dioses ajenos delante de mí¨.
“Este mandamiento revela la unicidad de Dios. Unicidad es la cualidad de lo que es único, sólo, singular y sin otro de su especie. Él establece que el parámetro para relacionarnos con Él sea ubicarlo y ubicarnos en la unicidad”.
El segundo mandamiento establece: “No te harás imagen, ni te inclinarás a él”.
La pastora Florencia indicó que “no puedo hacer imagen porque o sino el artista de la imagen se vuelve el creador del Creador. Porque yo estoy dándole una forma, yo le estoy dando una característica y me vuelvo ese creador. Pero la Biblia dice que a Dios nadie lo vio jamás. Quien lo ha dado a conocer es el hijo unigénito que está en el seno del padre. O sea, que Dios nos reveló su esencia a través de Jesús, pero no pidió que lo hiciéramos imagen, sino que conozcamos la esencia de lo que es Él, y que podamos percibirlo, percatarlo y vamos a ver cómo hacerlo. ¿Por qué no podemos hacer imagen? Porque justamente eso puede también trabajar en nosotros en decir, no es suficiente lo que veo, lo que imagino, para poder creer en Dios. Hay muchas personas que no creen en Dios porque dicen, hay falta de evidencia de quien es Dios”.
Sin embargo, la pastora aseguró que “Dios se reveló a través de la creación, y la creación nos hace comprender a Dios, pero no lo puede mostrar. Los cielos proclaman la gloria de Dios. El firmamento revela la obra de sus manos”.
“A aquel que diga que no hay evidencia –añadió-, hay que decirle que la Biblia indica que sí la hay. Hay evidencia. Todo lo que él creó me va a llevar a Dios. Es decir, que toda la creación es un dedo que señala a Dios. Pero yo no puedo tratar de acercarme a Dios haciendo una imagen de lo que es Él, porque me voy a limitar, porque voy a perderme todo lo que es Dios”.
“Empezá a mirar a ese Dios ilimitado, no lo limites”
En otro tramo de su prédica, la pastora Florencia resaltó que nosotros “somos limitados, pero tengo un Dios ilimitado. Yo sí soy débil, pero tengo un Dios todopoderoso. Yo sí soy natural, finito, pero Dios es sobrenatural. Yo sí soy débil, yo sí me canso, pero Dios no desfallece, no se cansa”. “Es decir –sostuvo-, podemos afirmar lo que Jesús dijo, que separado de él, nada podemos hacer. Yo tengo que enfrentar la vida ahora reconociendo mis limitaciones, pero cuando conozco a ese Dios que es todo, empiezo a confiar en Él. Porque lo que confíen en el Señor levantarán alas como las águilas. Las águilas pueden volar arriba de las tormentas, porque nada las detiene”.
